Este fin de semana ha tocado trabajar. La sensación de tiempo perdido es lo peor de todo. Entre desplazamientos y dormir un poco por las mañanas - estoy en el turno de noche - notas como las horas parecen desplegarse de tu calendario interior perdiéndose en la nada.
Me levanto de la cama al mediodía para poder felicitar a mi madre y comer con ella y mi padre, mientras me ducho y me preparo, pongo un disco, hoy me toca algo profundo, incluso denso.
La opción elegida funciona, aunque la verdad es que Nick Drake siempre deja tras de sí un halo depresivo, desasosegante.
Escojo su primer disco, el que más me gusta claramente, el sublime "Five leaves left". Lo hago sonar y decido que sea el protagonista de la fotografía de este domingo. En esta mañana suena una vez más "River man". Y con ella el tiempo sigue goteando.
¡Feliz domingo!
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