Es difícil que la publicación de nuevo material de determinados artistas y bandas no venga acompañado de una cierta polémica o al menos un imparable huracán de opiniones encontradas en cuanto al mismo.
Suele tratarse de gente que por los años que lleva en el negocio y el prestigio alcanzado después de trabajos de indiscutible calidad que han ido superando los ataques a los que les ha sometido el paso del tiempo y las tendencias que este acarrea, han terminado saliendo vitoriosos de estos envites y dejando además su lustre artístico impoluto e incluso mas brillante que cuando fueron concebidos.
En este grupo de gente se encuadra el rubiales de Florida Tom Petty y su cuádriga de Rompecorazones, quienes tienen el compromiso de lidiar con fans y detractores que han ido reclutando tras cuarenta años pisando tablas y grabando canciones de rock cada vez que publican nuevo disco.
Y la aparición de este último trabajo "Hypnotic Eyes" no tenia porque tener diferente protocolo, pues tan esperados son estos trabajos por una parroquia sedienta de entregas rockeras que vuelvan a insuflar en sus corazones lo que tiempo atrás insuflaron otras entregas que la decepción muchas veces es comprensible, y el paso del tiempo se hace notar tanto en unos: artistas, como en otros: fans.
Lo que quiero decir es que tal vez debamos posicionarnos dentro de unas coordenadas espacio-temporales actualizadas a la hora de escuchar y "respirar" los nuevos trabajos de unos artistas que también han compuesto y grabado estas nuevas canciones bajo el influjo de unas coordenadas actualizadas.
Creo que esto no siempre lo conseguimos, yo tampoco, menos que nadie yo, tan proclive a la melancolía y a la esperanza de una eterna juventud que me hace caer en la decepción en muchas ocasiones.
Pero creo, o al menos me da la sensación de que este último disco de Petty and company si me ha sido dado bajo el estado psiclogico oportuno, el oportuno para entender desde un primer momento las motivaciones de los creadores a la hora de engendrar este trabajo.
Un trabajo en el que la banda mira hacia atrás en busca de una actitud ante el rock que les tiña canas y reponga cabellos perdidos, que les cambie grasas por fibras a los tórax reblandecidos con el paso de las décadas e insufle vigor a músculos, incluidos sexuales, de sus castigados organismos.
Y en parte lo consiguen, y lo que considero mas meritorio, lo logran sin disfrazarse de adolescentes, manteniendo sus sesenta y... pero logrando que sus sonidos recuerden, que no se parezcan tanto como muchos han pretendido, pero si insisto, recuerden a ciertos momentos culminantes de sus carreras en la gloriosa década de los setenta.
Unas guitarras de evidente vigor y cierta vida juvenil que hacía tiempo no se asomaban a los surcos de los discos de Petty y sus amigos, unido a una vocalidad dotada de mas libertad en el fraseo y una base rítmica de latido pendencioso son algunas de las claves para conseguir este objetivo.
Las melodías son, como siempre, fluidas y mas poperas que rockeras, no pretenden acercarse a las raíces de la música americana como en su anterior entrega "Mojo" y se esparcen con mayor desenvoltura y menos rigor.
Con todo ello el disco me parece resuelto y alegre, luminoso y rápido con temas de texturas rockeras que encierran melodías de divertida vocación como la contundente "American Dream Plan B" de efectivo riff, la rítmica y eléctrica "Faul Lines" o la luminosa y juvenil "Red River", las tres lanzan al sprint a un disco que ya no para de esprintar hasta su culminación unos 32 minutos mas tarde.
Minutaje que da comienzo con los acordes reggae de "Full Grow Boy" que cuenta con el trabajo de calidad y clase de siempre del gran Mike Campbell.
"All You Can Carry" es un energético rock de vitamínica melodía y guitarras fibrosas y "Power Drunk" un eléctrico y ortodoxo medio tiempo que transcurre tranquilo como un rió de aguas calmas en la madrugada.
Guitarras de enervada actividad y base rítmica nerviosa para "Forgotten Man" y caricias sónicas y melódicas para un caramelo marca de la casa titulado "Sins of My Youth", deliciosa.
Contundencia semi hard en la machacona actividad guitarrera de "U Get Me High" de obvio estribillo.
La mas racial y sinuosa textura sónica (por fin las teclas de Benmont Tench suenan claras y honky-tonk) de "Burn Out Town" con una armónica que logra su objetivo nos envía al final de la fiesta de jóvenes maduros que es este trabajo, y lo hace con la extensa balada "Shadow People" que es sin duda el tema mas "de toda la vida" de el Lp, bonita balada que sirve para cierre perféctamente.
Un disco que me parece disfrutable de veras, entretenido y que nos hace mirar hacia atrás con diversión mas que con nostalgia y que no entiendo que suene a los discos de los setenta aunque si recuerda a las intenciones que albergaban los corazones de nuestros protagonistas casi cuarenta años atrás, un muy buen disco, que evidentemente no entra en el olimpo de los elegidos de la banda, que esos ya están certificados y me temo que no admiten socios nuevos.
Con este tipo de gente, que tienen tantos y tan buenos discos a sus espaldas, yo no trato de comparar si lo que saquen va a estar a la altura de sus discos más legendarios. Yo me conformo con que al poner el disco me haga pasar un buen rato, que suene a lo que es la banda en la actualidad, que melodías, riffs y estribillos se me queden en la cabeza y sean canciones reconocibles, y no refritos de lo que ya hayan grabado antes. Y yo con Hypnotic Eye me lo paso muy bien, lo mismo que me ocurrió con Echo, que fue el primer disco que escuché de ellos. No sé como pude disfrutarlo sin haberlo podido comparar con Damn The Torpedoes...
ResponderEliminarBuena entrada, saludos.
Estamos totalmente de acuerdo Gonzao.
EliminarGracias.
Salud.
Pues a mi es un disco que me encanta, y me lo pongo con una alegría de flipar. El Rubio de Florida sigue muy en forma.
ResponderEliminarAbrazos.
Yo también lo disfrtuto Savoy, la verdad es que desde el primer minuto me atrapo.
EliminarAbrazo.
Bueno, ya sabes mi opinión, me parece un buen disco pero no me acaba de hipnotizar. Tu reseña muy buena, en tu onda. Abrazo.
ResponderEliminarGracias Johnny, esto tambien sabes que depende de muchos conceptos, a veces un disco no consigues que entre y no hay nada que hacer, no pasa nada, a otro que hay muchos.
EliminarA mi me pasa con el de Beck...
Un abrazo.
En la linea de Johnny, Addison. Mira que soy fan de Petty (tengo toditos sus discos) y es una apuesta segura, pero desde el Last Dj le veo algo acomodado. Si, son buenos discos (algunos mejores que otros) pero ha ido perdiendo ese lado sensible que tenia irresistible (The Waiting por ejemplo) por intentar sonar mas denso, mas compacto. Se ha aburguesado un poco.
ResponderEliminarEl disco me gusta pero no estaria ni de lejos entre sus mejores discos.
Un abrazo
Pues te dire que entendiendo como vosotros que este disco no estará en la vida entre sus mejores álbunes, me ssuena mas libre que otros, Mojo por ejemplo me parece un Lp mucho mas pretenciosos que este, Hypnotic Eye me suena mas juvenil, no se , me ha conectado mejor...yo con el que no puedo es con The Last D.J..
EliminarDe cualquier forma como sabes en el debate esta la gracia y el aprendizaje de todos.
Mañana vuelvo a salir unos dias de vacas.
Nos vemos, un abrazo.
Tengo la impresión que ganará en directo. Esta concebido para que haga una gira Bilbao-BCN y yo lo vea...!! Un buen disco de Petty
ResponderEliminarEsa gira es un sueño o, como dice Shakespeare una realidad, si existe ese bolo lo veremos y quien sabe si juntos.
Eliminarefectivamente un buen disco.
Saludos.